jueves, 11 de abril de 2013

Las tarjetas de visita: tu carta de presentación

Hoy me gustaría hablar sobre un método de presentación que, en esta era tecnológica, sigue siendo importante a la hora de establecer contactos profesionales: las tarjetas de visita.

Y es que ese pedacito de cartulina es una carta valiosa en cuanto a nuestra presentación se refiere. No sólo porque en ella se pueden imprimir nuestros datos de contacto, sino porque, si la persona en cuestión se la queda, es posible que os acaben llamando para un encargo; la misión de la tarjeta ha resultado un éxito. Lo que más recomiendo es que, si tenéis una página web, escribidla en la tarjeta para que visiten vuestro sitio web y puedan saber un poco más de vosotros/as.

Aparte del punto de vista profesional, la tarjeta en sí dice mucho de nuestra personalidad. No es lo mismo una base de color blanco con un logo en escala de grises que una a todo color. La mía, por ejemplo, es de este último tipo, ya que el objetivo es llamar la atención de la persona a quien se la he entregado.

Concluyendo con esta reflexión, la edición de una tarjeta de visita no es un tema baladí, ya que una tarjeta impactante puede ayudar a que el/la cliente/a en potencia se acuerde de vosotros/as e interesarse por vuestros servicios.