martes, 23 de julio de 2019

Un truco para facilitarnos el trabajo de corrección: preparación textual


Estando como estoy de enfrascada en el Proyecto Raydon, me he dado cuenta de una cosa que a lo mejor otros/as revisores/as ya lo tienen en cuenta en sus encargos.

Al trabajar en un proyecto a largo plazo con el mismo escritor (de momento novel), he comprobado que aparecen los mismos elementos que precisan atención, ya sean ciertas faltas de ortografía o que el procesador de textos no reconoce algunas palabras y las considera erróneas. Sacando un ejemplo, en ningún capítulo la palabra "lágrima" tiene tilde; finalmente, al ver que se repetían las mismas erratas y que perdía mucho tiempo, elaboré lo que llamo "listado prerevisión".

Puede sonar muy rimbombante, pero en realidad es una lista de palabras o expresiones que, cuando empiezo un capítulo nuevo, tengo a mano para aplicar el maravilloso "Buscar y reemplazar". Obviamente no es recomendable reemplazar todos los elementos de golpe, y una muestra de ello es la palabra "ultimo"; como adjetivo lleva tilde y como verbo no, por lo que se debería mirar el contexto antes de añadírsela.

Este tipo de listas, obviamente, son algo orgánico y evolucionan al mismo tiempo de el escritor, pero eso es algo que se aprecia a medida que se trabaja con dicha lista.

Y vosotros/as, ¿tenéis algún truco? No dudéis en comentar y abrir debate.